Hoy en el Vulebar de las Fuerzas Armadas el pueblo hondureño se manifestó, de nuevo, para pedir que el gobierno golpista retroceda y para que el presidente legítimo, Zelaya, regrese al país.
Denuncia Xiomara de Zelaya la hipocresía de los golpistas que han reformado la Constitución cuando han querido y como han querido; y da un salto, apoyada por el pueblo que manifiesta, llamando a la instauración de una asamblea nacional constituyente.
El cerco mediático, que no permite que los hondureños reciban noticias, continúa. Las emisoras dispuestas a comunicar lo que está sucediendo trabajan con grandes dificultades y con cortes contínuos de la energía eléctrica.
Las organizaciones de la sociedad civil siguen con sus pronunciamientos en contra del golpe y el Partido Liberal del departamento de Santa Bárbara pide el restablecimiento del orden Constitucional, responsabilizan a Elvín Ernesto Santos por el golpe y, así mismo, solicitan la renuncia a los diputados que lo han avalado.
En Cortés las marchas siguen mientras que la comunidad Guadalupe Carney continúa amenazada por el ejercito.
Víctor Meza, se pronuncia sobre los 7 puntos, indica que el punto medular es el retorno de Zelaya, a partir de haber logrado este punto se pueden discutir todos los demás. Esta es una opinión personal de Meza e interpreta que para el pueblo en resistencia dos puntos son básicos: el regreso del presidente Zelaya y el castigo de los involucrados en el golpe. Critica el rol de los "medios de comunicación" y resalta el papel de medios alternativos o radios como "Radio Globo", que aún contra viento y marea, han cumplido con la función de informar.
Los golpistas, sin pudor alguno, insultan a la ciudadanía dándole espacios al torturador Joya, quien ahora se presenta como "analista político" asesor de la dictadura golpista, inyectando odio en la ciudadanía y dividiendo más a la sociedad hondureña.
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