Del resultado preliminar de la votación en las elecciones de ayer, domingo, el Partido Nacional (PN) logró una victoria arrasadora, frente a su adversario tradicional, el Partido Liberal (PL), cuya militancia optó básicamente por la abstención electoral en repudio al régimen inconstitucional encabezado por Micheletti, creado y sostenido con la fuerza militar.
Falta todavía establecer el porcentaje de la abstención electoral, la cual promete ser enorme, posiblemente en el rango de 65-70%. De ser así, o cercana a este volumen negativo, la situación política de Honduras –con la crisis intacta—estará muy lejos de despejarse y requerirá de extraordinarias medidas para conseguir la indispensable legitimación del resultado en las urnas.
Desde la perspectiva de los votos emitidos, el licenciado Porfirio Lobo Sosa (PN) es, con mucho, el presidente electo. En condiciones normales, esto significaría la elección de un presidente con un poderoso mandato, pero en circunstancias de facto y de amplio rechazo ciudadano al proceso electoral, más bien hace suponer una débil plataforma de respaldo popular, no más allá del 20% de la voluntad general.
El Partido Liberal, sin embargo, ha demostrado en esta prueba crucial su lealtad sin límite a su tradición democrática, al decidir su militancia la pérdida, antes que validar un régimen dictatorial con unas elecciones orientadas a exculpar el rompimiento de la Constitución producido por el golpe de Estado militar del 28 de junio.
En consecuencia, el resultado de estas elecciones no podría ser analizado con objetividad y suficiente lógica política si, como hasta el momento de hacer este comentario, la información oficial queda constreñida a los datos de los votos emitidos sin relacionarlos con el porcentaje –fundamental, en este caso—de abstención en la concurrencia a las mesas electorales.
Parece probable, por otra parte, que en lo concerniente a la votación de las diputaciones y de las municipales el patrón será similar a de la votación presidencial. Esto es así porque, de acuerdo con el comportamiento electoral en estos comicios, prácticamente fueron los militantes y simpatizantes del Partido Nacional quienes se volcaron sobre las urnas electorales. Esto querría decir, al ser de esta manera, que las otras votaciones –de diputados y alcaldes—tenderían a ser “en plancha”, sin mucha vocación de los electores para ejercer el voto cruzado. Esta característica resultaría preocupante para la estabilidad y el equilibrio político-social del país, en virtud de que la verdadera integración en nuestro sistema político se realiza mediante la proporcionalidad del producto electoral.
Está visto que el esfuerzo mediático, dentro de nuestro sistema de propaganda, estará enfocado en maximizar los resultados electorales de urna, tratando al mismo tiempo de esconder o disfrazar la abstención. En términos reales, ambas partes, la abstención y la votación en sí, son parte de un todo, principalmente si la primera es superior a la segunda en un sistema electoral de una sola vuelta.
Pero lo fundamental es, a final de cuentas, la legitimidad y el reconocimiento de los resultados electorales, dado que, en el Caso Honduras, ambas cuestiones son esenciales para resolver la crisis política y el futuro democrático del pueblo hondureño, con indudable proyección continental.
Ibero-Americana: Líderes ibero-americanos exigem recondução de Zelaya no poder nas Honduras 01 de Dezembro de 2009, 13:19
ResponderEliminarEstoril, 01 Dez (Lusa) - Os chefes de Estado e de Governo ibero-americanos exigiram hoje, no Estoril, a recondução de Manuel Zelaya "no cargo para que foi democraticamente eleito", como presidente das Honduras, como "passo fundamental" para "o regresso à normalidade democrática no país.
Sem objecções, segundo ao primeiro-ministro português, para uma declaração comum dos países presentes, esta posição ficou estabelecida na declaração especial apresentada pela presidência portuguesa no final da XIX Cimeira Ibero-americana.
No texto, a que a agência Lusa teve acesso, os líderes reunidos no Estoril condenam o golpe de Estado e consideram "inaceitáveis as graves violações dos direitos e liberdades fundamentais do povo hondurenho".
Cimeira Ibero-Americana agência Lusa, 1 de Dezembro de 2009.
ResponderEliminarO Presidente brasileiro rejeitou hoje, terça feira, "peremptoriamente" reconhecer ou sequer "conversar" com Profirio Lobo, vencedor das eleições nas Honduras, afirmando que se esse conflito fosse o tema da cimeira do Estoril, "não teria vindo".
Lula da Silva, que falou à saída de Lisboa, antes do final da Cimeira Ibero-americana, disse a jornalistas brasileiros e portugueses que no caso das Honduras há que "manter uma posição de bom-senso".
"Não podemos pactuar com o golpista, fazer de conta que não se passou nada. Daqui a nada o mau, o culpado, é o Zelaya. É uma questão de bom-senso, de princípios e de não pactuar com vandalismo político", afirmou.
"Não podemos fazer concessões ao golpista", afirmou.
Lula da Silva insistiu "peremptoriamente" que o Brasil não vai reconhecer o eventual governo que venha a ser formado por Lobo, a quem se referiu como "esse cidadão" com quem nem sequer diz estar preparado para "conversar".
Ainda assim Lula admitiu que é necessário "esperar para ver o que vai acontecer", sendo que "a posição actual é de não aceitar o processo eleitoral nas Honduras".
Questionado sobre o facto de não haver consenso em torno das Honduras da parte dos representantes dos 22 países ibero-americanos reunidos no Estoril, Lula da Silva considerou que "não é preciso ter uma posição conjunta".
"A cimeira não foi convocada para isto (Honduras). Se tivesse sido convocada para isso eu não teria vindo. Vim porque estamos a discutir temas importantes e pelo carinho que tenho pelo Presidente e primeiro-ministro portugueses", disse.
"É normal que cada um tenha a sua posição. Voltamos como chegámos. Isso não favorece nem prejudica ninguém", disse.
Lula da Silva insistiu que o Brasil não mudou a sua posição durante a cimeira: "Quando se discutiu Honduras, não quisemos discutir."
Questionado sobre o facto do Brasil ter reconhecido as eleições no Irão e não o voto nas Honduras, Lula da Silva afirmou que "os dois casos são completamente diferentes", já que as eleições iranianas "não violaram a constituição" e as das Honduras foram feitas "por um golpe repudiado por todo o mundo".
"O golpista travestiu-se de político eleito e convocou as eleições sem permitir que o Presidente Zelaya fosse responsável pelo processo", afirmou.